- En la clausura, celebrada en el Centro Federico García Lorca, se proyectó el documental Converso y su director David Arratibel mantuvo un coloquio con el público.
- br.a|MAR de Gabriel Roca ganó el Premio Aguaespejo. La mención especial del jurado fue para María Sánchez Martínez.
- Una sesión de cine en familia la matinal del domingo concluyó el festival, que regresó con fuerzas renovadas tras un año de ausencia.
La clausura de la vigésimo tercera edición del Festival Internacional de Jóvenes Realizadores tuvo lugar la noche del sábado en el Centro Federico García Lorca. Un acto presentado por Amalia Torres y Miguel García, los dos miembros más jóvenes del equipo, al que asistió el Concejal de Participación Ciudadana, Juventud y Deportes del Ayuntamiento de Granada, Eduardo Castillo.
Durante la clausura se proyectó una selección de veinte de las obras participantes en el Premio Aguaespejo, concedido por la Fundación Agua Granada, que superó el centenar de inscripciones en tiempo récord. La mayoría fueron procedentes de jóvenes y estudiantes granadinos que contaron con una única limitación, plasmar su talento en 30 segundos. El objetivo era fomentar la creatividad y la experimentación, dejándose inspirar por los lemas del festival, tres frases de David Lynch, Jonas Mekas y Val del Omar.
br.a|MAR de Gabriel Roca ganó el Premio Aguaespejo, valorado en 500 euros, del que hizo entrega el director de la Fundación Agua Granada Esteban de las Heras. La mención especial del jurado, formado por Mar Garrido, Carmen Sigler y Emilio Egea, fue para María Sánchez Martínez. A continuación se proyectó con la presencia de su director Converso, premiado documental en el que David Arratibel trata de comprender la repentina conversión al cristianismo de su familia.
Una sesión de cine en familia la matinal del domingo con La vida de Calabacín puso fin al #23FIJR, que entre cortos y largometrajes, durante la pasada semana ha proyectado cerca de cuarenta títulos de quince países distintos, demostrando ser un festival por y para jóvenes realizadores. No solo por la gran cantidad de prestigiosas óperas primas y segundas películas que ha programado, sino por las temáticas, que en muchos casos han reflejado los problemas de la juventud y de la adolescencia.
El festival, dirigido por José Luis Chacón y Maite García Ribot, cambió de equipo, de fecha en el calendario, de programación y de sede, priorizando los largometrajes y pasando a celebrarse en el Centro Federico García Lorca. Pese a todas las novedades, la respuesta de los granadinos ha sido extraordinaria, con más de 2000 espectadores y varios eventos con aforo completo, entre ellos la inauguración en homenaje a Julio Juste, la Master Class de María Cañas, Cine en las Aulas para alumnos de secundaria y el Encuentro con Realizadores con Fernando Franco.
La vigésimo tercera edición del Festival Internacional de Jóvenes Realizadores se celebró del 13 al 19 de noviembre. Ha sido promovida por Ayuntamiento de Granada, Diputación de Granada, Emasagra y Fundación Agua Granada, con la colaboración del Centro Federico García Lorca, Universidad de Granada, Facultad de Bellas Artes, La Madraza, Junta de Andalucía, Centro José Guerrero, Goethe Institut, inCINEración, cinEd, A Bao A Qu y Foco Henri Langlois.